"Un rojo como el de tus labios"
Espera me dijiste, me di la vuelta y me besaste, note que llorabas, cerré la puerta, me jalaste al sillón seguías llorando pero aun seguías besándome era extraño lo que sucedía, me dejaste de besar y te hiciste para atrás, te pregunte que pasaba y tu me golpeaste por sorpresa, caí en el sillón de espalda trate de levantarme pero volviste a golpearme ahora con un enorme jarrón en mi cabeza, sentí brotar de pronto la sangre, tu aun seguías llorando, las lagrimas ya habían recorrido tus labios rojos, empezaba a nublarse mi vista aun la sangre corría en el piso deslice mis manos por mi nuca y sentí una honda herida de la cual brotaba un rojo como el de tus labios, te vi acercarte yo ya en el piso, me clavaste un tacón en el vientre, seguido de un punta pie, no dejabas de golpear y tampoco de llorar ¿soy un enfermo por notar que uno de tus grandes senos se salio de tu blusa por error? Tu ya sobre el piso, me golpeabas con tus pequeñas manos en forma de puños, me arañabas con tus largas uñas pintadas de color rojo, me golpeabas y tus pequeñas manos se llenaban de mi sangre, no te importaba eso, solo seguías golpeándome y llorabas aun mas, sin darte cuenta que uno de tus senos seguía afuera al ritmo de tus golpes...
Espera me dijiste, me di la vuelta y me besaste, note que llorabas, cerré la puerta, me jalaste al sillón seguías llorando pero aun seguías besándome era extraño lo que sucedía, me dejaste de besar y te hiciste para atrás, te pregunte que pasaba y tu me golpeaste por sorpresa, caí en el sillón de espalda trate de levantarme pero volviste a golpearme ahora con un enorme jarrón en mi cabeza, sentí brotar de pronto la sangre, tu aun seguías llorando, las lagrimas ya habían recorrido tus labios rojos, empezaba a nublarse mi vista aun la sangre corría en el piso deslice mis manos por mi nuca y sentí una honda herida de la cual brotaba un rojo como el de tus labios, te vi acercarte yo ya en el piso, me clavaste un tacón en el vientre, seguido de un punta pie, no dejabas de golpear y tampoco de llorar ¿soy un enfermo por notar que uno de tus grandes senos se salio de tu blusa por error? Tu ya sobre el piso, me golpeabas con tus pequeñas manos en forma de puños, me arañabas con tus largas uñas pintadas de color rojo, me golpeabas y tus pequeñas manos se llenaban de mi sangre, no te importaba eso, solo seguías golpeándome y llorabas aun mas, sin darte cuenta que uno de tus senos seguía afuera al ritmo de tus golpes...
Isaac Contreras
2 comentarios:
continuará ... ? me dejaste con ganas de saber que pasó después ! jaaja perfecto como siempre :D
geniaaal!!! ... buena historia
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